Papel, el producto reciclable que ahorra agua
Muchos de los productos que se ofrecen en la actualidad están clasificados como respetuosos con el medio ambiente o ecológicos. Esto sucede con productos que en su fabricación no intervienen productos naturales o biológicos, por ejemplo como en los árboles de navidad de plástico o en los soportes electrónicos, pero sin tener en consideración que para la fabricación de unos o el funcionamiento de otros se consumen recursos fósiles que tardaron millones de años en formarse y de los que no podremos servirnos nunca más. No es así con los objetos elaborados con recursos biológicos, si se respeta su tasa de renovación, nos permiten seguir disponiendo de ellos ilimitadamente a la vez que se producen efectos colaterales positivos. Por ejemplo el papel y el cartón. La industria papelera es consciente que debe cuidar su principal fuente de recursos y utiliza cada vez más de papel usado que es uno de los residuos más fáciles de reciclar. Además los procesos tienden a ser más eficientes disminuyendo el consumo de agua que en muchos casos se trata de agua reutilizada. Siempre que podamos evitar consumir un recurso natural estaremos contribuyendo a preservar nuestro entorno pero si utilizamos productos sintéticos fomentaremos un deterioro mayor del medio ambiente.